Los camaristas Mariano Borinsky, Diego Barroetaveña, Daniel Petrone, Gustavo Hornos y Guillermo Yacobucci le pidieron al presidente de la Corte Suprema, Horacio Rosatti, que intervenga para desplazar a su colega Ana María Figueroa, quien cumplió ayer 75 años y según la ley debería jubilarse.
La jueza considera que puede continuar en funciones en los términos del inciso «d» del artículo 2º en la Resolución 521/2017, aprobada por el Consejo de la Magistratura.
Según su interpretación de ese texto ella puede mantenerse en su sillón toda vez que su pliego espera tratamiento en la Cámara Alta y el dictamen favorable de la Comisión de Acuerdos obra hasta el recambio parlamentario de diciembre próximo.
Sin embargo, la misiva que cursaron a Rosatti los colegas de Figueroa en el máximo tribunal penal del país alega que «no se ha completado al día de la fecha el trámite parlamentario para un nuevo nombramiento» y «la situación podría devenir en el cese de sus funciones».