Las FDI informaron que en el sur del Líbano, durante una operación que incluía «extensas búsquedas subterráneas en el área», las tropas «descubrieron y destruyeron una instalación militar subterránea estratégica construida por Hezbolá» a lo largo de los últimos 15 años.
«La instalación tenía más de 1,5 kilómetros de largo y almacenaba equipos que permitían a cientos de militantes permanecer en el interior durante largos períodos de tiempo«, precisó el Ejército. Los militares israelíes aseguraron que el túnel tenía electricidad, albergaba camas y armarios, así como un gran arsenal de armas, incluidos misiles antitanques, cohetes, minas terrestres y numerosos artefactos explosivos.
Durante el operativo en «el centro de mando subterráneo», los soldados israelíes «se enfrentaron cuerpo a cuerpo con militantes atrincherados«. «Todas las fuerzas enemigas fueron eliminadas», concluyeron las FDI.