En el súper-inflacionario 2023 el stock de títulos de deuda que coloca el Banco Central (BCRA) para absorber el excedente pesos no para de crecer. Al 11 de septiembre contabilizaban $20 billones ($20.042.492 millones), una cifra astronómica equivalente a unos USD 57.272 millones al tipo de cambio oficial, más de dos veces las actuales reservas brutas en divisas de la entidad que preside Miguel Pesce.
El stock de papeles con los que se regula la masa monetaria crece por la tasa de política monetaria a un ritmo cercano a $2 billones por mes. Estos títulos son el respaldo de los plazos fijos de ahorristas, empresas y organismos públicos.
También representan tres veces la Base Monetaria, que es la cantidad de dinero con la que funciona la economía, en $6,6 billones. Esto significa que de cuatro pesos emitidos, hay tres fuera de circulación colocados en deuda del BCRA para intentar limitar su efecto inflacionario.
A la vez, el crecimiento de estos pasivos remunerados del BCRA (Letras de Liquidez -Leliq-, Pases pasivos y Notas del BCRA -Nobac-) potencia las ya exacerbadas expectativas devaluatorias e inflacionarias, ante el serio riesgo de que esos pesos sean liberados y se vuelquen al mercado.
Además, el stock de Leliq, Nobac y Pases registró un incremento anual de 178% desde $7,05 billones del 5 de septiembre del 2022, es decir, unos 60 puntos porcentuales por encima de la inflación.