El título del artículo del Financial Times es llamativo, por tratarse de un medio especializado en finanzas internacionales: «La próxima misión económica de Javier Milei: freidoras de aire a precios accesibles», dice.
Esta vez, el periódico británico no puso el foco en la evolución del mercado bursátil ni en la construcción política del Gobierno. Tampoco se explayó en la figura del Presidente. No.
Para el FT, lo más importante ahora pasa por el encarecimiento en dólares de la Argentina. Ahí puso la lupa.
«Una freidora de aire Black & Decker que se vende por u$s100 en los Estados Unidos cuesta u$s289 en Argentina, según las publicaciones de comercios minoristas ‘online’. Un vestido sencillo de Zara que cuesta u$s25 en los Estados Unidos se vende por u$s67 en el país, mientras que un iPhone 15 de Apple, que está a la venta por u$s799 en los Estados Unidos, cuesta u$s2.800 en Argentina.»
«Javier Milei ha comenzado a abrir de manera drástica la economía proteccionista de Argentina, reduciendo aranceles en un intento de disminuir los altos precios de todo, desde freidoras de aire hasta productos electrónicos», completó la nota del medio inglés.
Los ejemplos publicados por el Financial Times son conocidos por los consumidores argentinos, que de a miles viajaron en este comienzo de 2025 a Chile y Brasil para disfrutar de la naturaleza y las playas, pero también para aprovechar las ofertas de productos en esos países ante la inflación en dólares que sufrió la Argentina en los últimos meses.
Tanto es así que Juan Carlos Gerard, Gerente Comercial de Easton Outlet Mall en Santiago de Chile, confesó en diálogo con iProfesional que uno de cada cuatro dólares que se facturan en el shopping es gracias a los argentinos que llegaron a esa ciudad.
Gerard dice que el ranking de ventas lo encabeza el calzado deportivo, seguido de indumentaria variada y los electrónicos. El gerente también aseguró que los argentinos suelen agotar los stocks de ropa de cama y de utensilios de cocina, que en Chile cuestan menos de la mitad que en Buenos Aires.
Argentina cara en dólares: teléfono desde Wall Street
Esta pequeña historia es real: la protagonizó el director de uno de los bancos que son referencia en Wall Street. Una entidad que históricamente guarda relación comercial con la Argentina.
Por obvias razones, ese directivo pide reserva de su identidad, pero lo que comenta también sirve para ilustrar el actual escenario económico y cambiario en el país.
El financista estuvo para fin de año de visita en la Argentina. Fue a las Cataratas. Luego pasó por la Ciudad de Buenos Aires.
En su diálogo contó que decidió alojarse del lado brasileño. Cuando pautó las reservas, el costo en el país vecino representaba la mitad que en la Argentina. «Hasta por una Coca Cola se notaba la diferencia: en Brasil, un envase pequeño en el hotel costaba u$s2,5; en la Argentina u$s7».
«Cuando estuvimos en Palermo, y fuimos de paseo para comprar algo de ropa, nos volvimos con las manos vacías«, dijo.
«Los precios en los restaurantes eran similares a los de Nueva York, al menos en Palermo, teniendo en cuenta que en EE. UU. se paga una propina de entre 15% y 20% de la adición».
«En Buenos Aires, lo único barato es el viaje en Uber«, cerró el financista.
Toda una definición de la economía argentina: el valor del Uber se encuentra desregulado y los choferes, en muchos casos, tienen esa función como segundo trabajo (part time) y acepta realizarlo por un ingreso inferior a un trabajador empleado en «blanco» en una fábrica o en un comercio.