Elon Musk propone fusionar la inteligencia humana con la IA

Los ensayos clínicos de Neuralink pronto comenzarán en seres humanos. La empresa lo anunciaba recientemente, y aunque dicho proceso será largo —se estiman seis años— es un paso decisivo para el avance de su tecnología BCI (Brain-Computer Interface). Lo importante de este proyecto no es que pueda ayudar a pacientes con algún tipo de parálisis: el objetivo final de Musk es en realidad otro muy distinto.

«Simbiosis con la IA». El magnate lleva años dejando claro que en realidad lo que quiere conseguir con Neuralink es «lograr la simbiosis con la inteligencia artificial» y «fusionar» a los humanos con la IA. Para él el riesgo de que la aparición de una inteligencia artificial general es real, pero graccias a los implantes de Neuralink los humanos no «se quedarán atrás» y no serán «mascotas» de las máquinas.

Ademas el multimillonario, Elon Musk, planteó la posibilidad de perder peso con la ayuda de chips de computadora en abril, mientras hablaba de su Neuralink BCI en una entrevista TED . «Creo que se puede resolver una gama muy amplia de lesiones cerebrales», dijo Musk, «incluida la depresión grave, la obesidad mórbida, [los trastornos del sueño y] la restauración de la memoria en las personas mayores».

No es una afirmación descabellada. Neuralink, al igual que otros BCI experimentales, reconecta el sistema nervioso. Las personas que sufren parálisis han utilizado los implantes para recuperar el control parcial de sus extremidades . Las BCI pueden incluso traducir impulsos neuronales (pensamientos, básicamente) en señales de radio y transmitirlas a drones, computadoras u otros dispositivos.

Por lo tanto, no es inconcebible que alguien que sufre de obesidad mórbida pueda utilizar un BCI para evitar las partes de su cerebro que le instan a comer en exceso, asegura Elon.

Pero hay problemas

Para empezar, si bien existen BCI que las personas pueden usar como sombreros , los más versátiles y sensibles, como el de Neuralink, requieren cirugía cerebral. Los cirujanos literalmente perforan un agujero en el cráneo del paciente e implantan el dispositivo.

es_ESSpanish