Un equipo de científicos chinos y un médico español lograron por primera vez generar un esbozo de órgano humano en otro animal. El experimento se realizó con riñones humanizados en embriones de cerdo, lo que los hace soñar con poder utilizar otros mamíferos como fuente de órganos para humanos.
Estos organismos híbridos, que se denominan quimeras, en referencia al monstruo mitológico con cabeza de león, panza de cabra y cola de dragón, causan aún grandes discusiones éticas, sobre si es correcto este accionar.
En el Instituto de Biomedicina y Salud de Guangzhou, los investigadores reprogramaron células humanas adultas hasta recuperar su capacidad de formar cualquier órgano o tejido del cuerpo. Luego introdujeron esas células humanas en embriones de cerdo de pocos días, modificados genéticamente antes para que no desarrollen riñones porcinos.
Las células humanas ocuparon ese vacío y generaron un riñón humanizado. Estos embriones de cerdo-humano se gestaron en cerdas hasta los 28 días, aproximadamente una cuarta parte del tiempo de embarazo de la especie. La mitad de las células de sus riñones son humanas.
Un trabajo que inició en 2017
El trabajo, que lideró el científico chino Liangxue Lai, prosigue el camino que inició el equipo del investigador español Juan Carlos Izpisua, que en 2017 anunció la creación de embriones de cerdo-humano que apenas tenían una célula humana por cada 100.000 porcinas.
Aquellos experimentos se realizaron en la Universidad de Murcia y en dos granjas de esa ciudad, tras un intenso debate de una comisión de expertos del Instituto de Salud Carlos III, que autorizó los ensayos pese a “los riesgos biológicos inherentes a la generación de quimeras cerdo/humano”. El comité puso como condición que ningún animal con células humanas pudiera reproducirse.