La Corte Suprema de Justicia de la Nación confirmó el sobreseimiento de Milagro Sala en el marco de la denominada causa «Huevazos», en la que había sido condenada en base a una denunciada del por entonces senador nacional, Gerardo Morales; así lo confirmó este miércoles el abogado Marcos Aldazabal, defensor de la dirigente de la Tupac Amaru.
El 16 de octubre de 2009, en el marco de una conferencia de prensa realizada en el Consejo Profesional de Ciencias Económicas de Jujuy, Morales, quien por entonces ostentaba el cargo de senador nacional, fue agredido con huevos por una manifestación social, hecho que dio paso a la denuncia contra la dirigente social por ser la supuesta instigadora de la agresión.
Siete años más tarde, Sala iba a ser condenada por el Tribunal Oral Federal (TOF) de Jujuy, a una pena de tres años de prisión en suspenso por el supuesto delito de daño agravado en su carácter de instigadora, en tanto que iba a ser sobreseída por las supuestas amenazas, debido a la prescripción de ese hecho.
Fue el abogado Aldazabal quien a través de su cuenta en la red social X, comunicó la decisión de la Corte al sostener que esta rechazó un recurso de Morales, «por lo que quedó firme el sobreseimiento de Milagro Sala en la causa ‘los huevazos'», con lo que advirtió que se «termina un caso de persecución política, en el que Milagro fue condenada por una manifestación contra Morales en la que ni siquiera estuvo».
Destacó además, que la líder de la Tupac Amaru fue condenada «con un solo testimonio», el de René Orlando Orellano, quien dijo que ella había organizado la manifestación: «Esa persona fue imputada por falso testimonio: negó trabajar para Morales, y un informe reveló que era mentira», indicó el abogado defensor.
Aldazabal esgrimió que «en otras irregularidades», en 2021 el TOF de Jujuy negó dictar la prescripción de la causa, a pesar que había pasado el plazo legalmente establecido e iba a ser la Cámara de Casación Federal la que les «dio la razón y, hoy, la Corte confirmó la decisión».
Sala, quien en junio de 2022 padeció una trombosis venosa profunda lo que obligó a su internación, seguirá cumpliendo prisión domiciliaria por haber sido condenada en 2016 a 13 años de cárcel en la denominada causa «Pibes Villeros, en la que se la encontró responsable de los delitos de «asociación ilícita», «fraude al Estado» y «extorsión» a raíz del desvío fondos destinados -a través de la Tupac Amaru- a la construcción de viviendas sociales.
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