El Gobierno volvió a justificar este jueves la represión en las afueras del Congreso de la Nación contra quienes se manifestaban en contra del veto de Javier Milei a la nueva ley de movilidad. “No era represión brutal, era tratar de mantener el orden y correr a los manifestantes”, aseguró el jefe de Gabinete, Guillermo Francos. Horas antes había asegurado que había «muchos jóvenes entre los jubilados».
A su vez, el funcionario cuestionó a los movimientos sociales que estuvieron presentes: “En realidad había partidos y movimientos políticos que habitualmente perturban la libertad de la gente en la calle”. “Hay un protocolo que hay que cumplir, que es un protocolo de seguridad y que se aplica en la calle de la ciudad y el ministerio de Seguridad lo hace cumplir con las fuerzas de seguridad”, justificó.
En el mismo sentido, Francos hizo referencia a lo ocurrido en el interior del Congreso, mientras sucedían los hechos, que terminó con el levantamiento de la sesión donde presentaba su primer informe de gestión. “Por supuesto que se aprovechan estos episodios públicos a la calle para generar temas políticos como el que fue planteado ayer”, sostuvo.
Luego detalló que “en el momento que estaba interviniendo el último bloque, de Unión por la Patria, aparece una diputada de la izquierda haciendo un cuestionamiento sobre la brutal represión policial, cosa que no era represión brutal, era tratar de mantener el orden y correr a los manifestantes. Se escudan en los jubilados”.
“Eso generó algunas reacciones y, finalmente, cuando estaban avanzando las asociaciones, ante esta intervención de la diputada de izquierda, se levantó el bloque de Unión por la Patria y se fue de la sesión”, agregó.
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